“Es obvio que el tiempo pasa, no hay nada de nuevo en ello jajajaja.
Pero para nosotros, los que nos dedicamos a entrenar las Artes Marciales,
hay cosas que marcan ciertos hitos a lo largo de los años durante
nuestra disciplina (cualquiera fuere el sistema, estilo o la modalidad
en la que cada quien se encuentre), y son esos hitos justamente los que
nos recuerdan el tiempo que ha pasado en nuestras vidas de kung fu.
Mucho,
poco, algo, pueden ser diferentes mediciones que solo son importantes
desde lo personal de cada uno. Casi nunca solemos recodar el tiempo que
pasa para otros, porque son en realidad NUESTRAS experiencias aquellas valiosas cosas que podemos atesorar vívidamente, en cada recuerdo, “un volver a vivirlo” como aquel instante maravilloso que nos marcó.
El
caso es que mientras ese tiempo pasa, parece que es en pocas ocasiones
que somos capaces de recordarlo. Alguna fecha en el calendario anual,
una conversación circunstancial con algún amigo, un estudiante nuestro
que nos lo recuerda fortuitamente en una amena charla, la vista de una
foto “de aquel entonces”, etc.
Y a todo esto, seguramente la pregunta es muy simple: porqué me he puesto a escribir sobre este “paso del tiempo” ?.
La respuesta es más simple todavía.
Este
ha sido el disparador de la Nota presente. (y me atrevo a decir, que a
los más “curiosos” -siempre hay algunos más curioso que otros para
estas lecturas- les gustará leer los datos ).
Subí una
foto a mi Muro, y un estudiante mío (hoy ya un Sifu de nuestra
Institución -Hernan Dell´Oso- quien me ha acompañado en distintas
épocas a entrenar en China con mi Maestro, me recordó mediante ESA foto, la cantidad de años que habían pasado desde que sucedió.
Y allí me vino inmediatamente al recuerdo, algo más lejano todavía, como mis orígenes, o mis inicios en las Artes Marciales.
Comencé a los 14 años a principios de la década de 1970.
Mi incursión fue entre un grupo de personas vestidas con Karategi
blanco, que se tomaban de las solapas y de las mangas de sus equipos, y
se arrojaban con una facilidad que maravillaba. Inolvidable !
Lo recuerdo como si fuera HOY. El arte se llamaba (y se llama) Yudo (de línea Kodokan -Gigoro Kano-), y mi Maestro de ese tiempo se llamaba Vicente Stanciani. Si me permiten la expresión, “qué tiempos aquellos !!!”.
Yo entrenaba y aprendía con él personalmente. Aprendí a saber caer,
“luego” aprendí a lanzar a mi oponente. Y después, solo fue DISFRUTAR
de toda esa enseñanza.
Siempre dentro de la década de 1970,
descubrí más tarde algo que me motivó más aún, porque se trataba de
alcanzar a tu oponente y golpearlo rápidamente desde afuera -de la
distancia-, más emocionante aún, era que lo podías hacer con tus puños y
tus pies (patadas).
Por supuesto, se trataba del Karate. En ese tiempo me inicié dentro del Karate de estilo Shotokan.
Otro hito inolvidable. Cada día, cada entrenamiento, cada “pasar los límites”
era sencillamente lo más motivante que por aquellos días había.
Recuerdo perfectamente los nombres de quienes aprendí, y con quienes lo
entrené. Mi Instructor Cinta Negra fue Yukio Mayoshimoto,
una limpieza técnica que daba “pavura” verlo ejecutarla. Luego de él,
también vino a entrenarnos un Maestro que era superior a él, se trataba
de Mitsuo Inoue. Precisión, velocidad, coraje, eran
características que más allá de ser la expresión de su Karate, eran
prácticamente parte de él mismo y su personalidad.
Pasando la década de los años ´70, y en los comienzos de la década de 1980,
en esa justa transición, ya me encontraba aprendiendo y entrenando las
artes marciales que definitivamente marcarían mi camino hasta el día
de HOY. Sí, las Artes Marciales Chinas Tradicionales.
El descubrimiento real de las mismas, vino de la mano de mi Laoshi por aquel entonces, llamado Tong Zhihua, quien provenía de Shanghai, y era versado en algunos estilos de pugilato (públicamente solía mostrar única y solamente el estilo SUN de Tai Chi Chuan aprendido con la Maestra SUN Jian Yun ,hija del Sifu Sun Lu Tang), y también doctor en medicina tradicional china. Vino acompañado de su esposa, la Sra. Wu Beiwen, era experta en Yang Tai Chi Chuan. Esta etapa fue sumamente rica en aprendizaje, detalles y conductas que me formaron para comprender las Artes Marciales desde el interior de una familia de origen Chino.
Compartía mis días viviendo gran parte del tiempo en su casa y con sus
familiares (en ese entonces yo me encontraba casado y recién con dos
hijas), y a su vez, al tiempo comencé a incursionar en la enseñanza del
pugilato a otras personas, en distintos sitios (Colonia Japonesa de la
ciudad de Abasto -Club Abastense- , en el Club YPF y Club Almafuerte
de la ciudad de Berisso, y en algún Gimnasio y también en el Club
Deportivo La Plata de la ciudad de La Plata). Amigos, una sacrificada y gloriosa década la de los ´80.
Una peculiaridad de mi Laoshi Tong, era que permanentemente me recomendaba acompañarlo a él a visitar China
(como si hubiese sido tan fácil en aquellos momentos en mi País, cosa
que no lo era). Él decía siempre que mis posibilidades de un kung fu
más elevado, allí serían altamente alcanzables y benéficas para mí. Yo
estaba más que conforme con su enseñanza, e incluso de las visitas que
periódicamente llegaban de China, o estaban solo de paso por mi País,
de quienes afortunadamente podía aprender algunas cosas más dentro de
la Casa de mi Laoshi. Recuerdo en este momento, entre otras, la visita
de un Maestro de Xing Yiquan y su hijo. Extraordinaria habilidad y una
perfecta descarga de fajing que me maravilló.
Mucho tiempo después (década de los años ´90,
precisamente en los últimos años de dicha década), la suerte y el
esfuerzo hicieron que pudiera ser parte de un viaje a China, en donde
las puertas del Wushu Tradicional decididamente se
abrieron ante mí, como la expresión más normal de todo el camino previo
que yo había recorrido hasta ese momento.
Sería extenso dedicar palabras a esta época, y en aras de resumirlo, hoy me he dado cuenta que seguí las enseñanzas (de Ving Tsun) de mi Sifu el Sr. Lun Kai, en la ciudad de Foshan, provincia china de Guangdong, durante 16 años. Visitándolo en su casa periódicamente, hasta completar de manera total el Ving Tsun que él heredó de mi Sikung el Sr. Yip Man de Foshan.
Quieren que les comente una CURIOSIDAD
-una perla en realidad si lo prefieren- al respecto ?. En esta
relación con mi Maestro (Lun Kai), yo no fui quien lo eligió a él, sino
que él me eligió a mí, y me dio la posibilidad de aprender de él, a
raíz de una muestra que yo efectué allí en Foshan con mi escaso e
imperfecto Ving Tsun de aquel tiempo y momento. Hoy no me alcanzan las
palabras para agradecerle todo lo caminado junto a él.
Y aquí estamos, en los días presentes, año 2014 !!!
En
el medio, han quedado otras muchas experiencias, estudiando algunos
otros estilos del Wushu Tradicional Chino, tanto en Argentina como en
China y Hong Kong, y con diversas personalidades de renombre (Master
Kwok Wai Jam, Master Fok Chiu, Master Huang Zhi Cheng, Master Olive Hui
Yin Foon, Master Tung Kuo Sao, Master Su Yu Chang, etc.) algunos de
ellos con el estilo completo y otros solo formas parciales de su estilo,
que por lo extenso de los detalles, dejamos -quizás- para otra
ocasión.
16 AÑOS CON MI MAESTRO, y 44 AÑOS EN LAS ARTES MARCIALES EN GENERAL, miro hacia atrás y amigo mío, ante esto, no me queda otra cosa que decir que “EL TIEMPO PASA… Te diste cuenta ?”."
-Copyright © Neldo Sacomani-
Y a vos -si te tuteo- o a Ustedes en general, qué les pasa cuando rememoran sus vidas como artistas marciales ?
Bienvenidos los que quieran comentar.
Un abrazo, y como siempre: buena práctica para TODOS !
Las Artes Marciales Chinas Tradicionales poseen una interesante Historia, polifacéticos Sistemas Técnicos orientados a la lucha cuerpo a cuerpo, abundante información respecto de la Defensa Personal, herramientas para conservar la buena Salud, Códigos de Conducta y muchas otras cosas, que hacen del estudio de las mismas, una verdadera ruta digna de ser transitada. Legadas de generación en generación, hoy día se conservan como un tesoro inestimable.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
"Nunca llegarás a tu destino si te detienes a arrojar piedras a cada perro que te ladre" :-)
ResponderEliminar